lunes, 9 de octubre de 2006

North Korea: The Thin Red Line

Como era de esperarse, Corea del Norte realizó su primer ensayo nuclear a pesar de las múltiples condenas de la comunidad internacional. El siguiente paso consiste ahora en tratar de acostumbrarnos a un escenario donde la proliferación de armamento nuclear sea la que marque la agenda de los países.

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Los tres mayores majaderos del mundo hemos sido Jesucristo, don Quijote y yo…” dijo Simón Bolívar poco antes de morir. Aseveración discutible desde luego, pues la historia ha registrado tal vez mayores majaderos que los citados por el libertador. Pero si hiciéramos tal selección hacia finales del siglo XX y en los albores del siglo XXI, dicha terna de “majaderos”—en un sentido peyorativo--estaría seguramente conformada por George Bush, Donald Rumsfeld y Kim Jong-il, en ese mismo orden.

Dudamos que muchos discrepen de nosotros al tomarnos la licencia de hacer ese breve listado. En principio porque cualquiera de los elegidos es buen candidato para integrar la lista de los personajes nefastos cuando se elabore el balance del presente siglo.

Los dos primeros merecen un sitial deshonroso en la historia por hacer del mundo un lugar más inseguro, por vulnerar el derecho internacional y por socavar el multilateralismo. En otras palabras, lo que estamos diciendo es que el dúo es responsable por el incremento de la violencia global y de la carrera armamentista, ya que nunca, ni si quiera en las peores etapas de la guerra fría, el mundo ha gastado tanto en armas y tan poco desarrollo. Es decir, que más hemos desembolsado en guerras y casi nada en la paz.

Parte de la culpa la tiene la implementación de la doctrina de la guerra preventiva, la cual resultó un arma de doble filo pues en vez de suprimir las amenazas; las ha creado. Decimos esto porque países sindicados por el Presidente norteamericano como miembros del “eje del mal” han considerado que el único modo de disuadir a la superpotencia de los “ataques preventivoses dotàndose de capacidad nuclear. Así, la política exterior norteamericana es responsable de que los estados de dicho "eje" se hayan visto obligados a desconocer el Tratado de No Proliferación Nuclear, entre otros instrumentos y acuerdos internacionales.

El ex presidente surcoreano Kim Dae-jung, arquitecto de la ahora fugaz reconciliación con el Norte y Premio Nóbel de la Paz en 2002, considera que: “Los neoconservadores de Estados Unidos no quieren la paz en esta región. Son dogmáticos. No defienden los intereses de Estados Unidos, como hacía el presidente Clinton que alentaba nuestros esfuerzos para un diálogo pacífico, sino que se mantienen obsesionados por una ideología: la de las sanciones, que nunca funcionó, ni contra Cuba, ni contra Irak, ni contra Afganistán, ni contra Irán. Presionan a Tokio para que él también imponga sanciones, lo cual agrava los desacuerdos regionales. Esos desacuerdos proporcionan a su vez un pretexto a la derecha japonesa para reclamar el rearme de Japón. Lo que aumenta la desconfianza de China. Es una espiral muy peligrosa".

De este modo no somos los únicos en pensar que la estrategia de EE.UU. no sólo es equivocada sino también peligrosa. La ejecución de de la guerra preventiva y las sanciones económicas han generado como respuesta inmediata el desarrollo de capacidad nuclear ofensiva por parte de norcorea e Irán. Lo cual no solamente frustra los planes de contención bélica de EE.UU. sino que coloca en serio riesgo a sus aliados regionales (Israel en oriente próximo y Corea del Sur y Japón en el nordeste asiático).

Es coherente especular que Norteamérica aún confía en la estrategia que implementò en Vietnam, es decir, en creer que la superioridad convencional basta para acabar con las amenazas. Sin considerar que su presencia en los conflictos regionales o étnicos sólo provoca desequilibrios y dificulta los consensos. EE.UU., como todo imperio, trata de que el curso de la historia le sea favorable. Lo cual es a todas luces imposible, porque los acuerdos impuestos por la fuerza o en condiciones penosas para las partes sólo son artificiales o precarios. Esto es, que no obedecen al real sentir de los involucrados y muchas veces llegan a desencadenar problemas mayores a los que se creían “resueltos”. Un ejemplo típico de esto fue la partición de Alemania o de las dos coreas, cuya reunificación, a pesar de las tenciones, tendrá que producirse.

La tensión existente es una consecuencia de haber dividido y enemistado a un mismo pueblo. Antes el dogmatismo provenía del bloque comunista integrado por China y la URSS, ahora nace de EE.UU., ya que los halcones de Washington han venido boicoteando el proceso de negociación integrado por Rusia, China, Japón, EE.UU. y las dos coreas.

El entrampamiento se originó después del acuerdo del 19 de septiembre de 2005, cuando el Departamento del Tesoro de Estados Unidos adoptó medidas financieras contra Pyongyang con el pretexto de que un banco de Macao (China), el Banco Delta Asia, había blanqueado dinero por cuenta de Corea del Norte. Cosa que no ha demostrado ninguna investigación internacional. Intimidado por Washington, el banco congeló en el mes de febrero último 24 millones de activos norcoreanos. Pyongyang cerró entonces la puerta a las negociaciones de los Seis, reafirmó su derecho a poseer la bomba atómica y procedió a los lanzamientos de prueba del pasado 5 de julio desaprobados por el Consejo de Seguridad de la ONU, uno de cuyos miembros es China.

Por si fuera poco, EE.UU. ha intentado persuadir a Corea del Sur con el fin de aumentar las sanciones contra Corea del Norte. Pero Seúl no quiere ceder a las presiones de Washington, y desea conservar una autonomía de decisión. Como afirma Kim Dae-jung: "No queremos ni una reunificación por la fuerza como en Vietnam, ni una reunificación ruinosa como en Alemania. Que Estados Unidos nos deje seguir nuestro propio ritmo, lento y pacífico, hacia una reunificación feliz".

Ignacio Ramonet, director de Le Monde Diplomatique, sostiene que “las autoridades del sur apuestan por el diálogo y los intercambios, especialmente económicos, y por el desarrollo de intereses comunes para reducir las disparidades entre los dos países, prevenir los conflictos y preparar una eventual reunificación. A partir de entonces, el monto de los intercambios comerciales ha alcanzado la suma de mil millones de dólares, convirtiendo a Corea del Sur en el segundo socio económico de Pyongyang después de China”.

De ahí que Estados Unidos sea visto por sectores progresistas como el opositor número uno para llevar adelante tratativas que conduzcan al desarme de la Península y a la paz.

Mientras tanto, Irán, otra nación con pretensiones nucleares, está expectante a las acontecimientos que puedan producirse ya que lo que se determine en el caso norcoreano bien puede llegar a serle aplicable. La diferencia entre ambos conflictos tal vez pase por tres razones: 1) Irán cuenta con mucho mayor apoyo internacional que norcorea, ya que de no ser por China, estaría aislada en lo político; 2) la república islámica está en mejores condiciones de afrontar un conflicto con occidente pues posee percibe enormes ingresos por la exportación de su crudo; 3) una nueva guerra en el golfo incrementaría descomunalmente el precio del petróleo, disparándose de tal forma como el torrente de crudo que expulsa la boca de un pozo. Un mayor precio del barril representa un disuasivo importante al momento de considerar cualquier tipo de ofensiva sobre territorio iraní.

No creemos, que a raíz de las pruebas nucleares, el Consejo de Seguridad resuelva establecer sanciones que conlleve al uso de la fuerza dado que la respuesta norcoreana no se haría esperar. Un eventual ataque al régimen comunista no sólo comprometería la vida de los más de 30,000 soldados norteamericanos desplegados en surcorea, sino la eventual destrucción de sus dos mayores aliados en la región (Corea del Sur y Japón). Lo cual inclinaría la balanza de poder hacia China, pues los mercados bursátiles norteamericanos jamás podrían recuperarse de la debacle de su mayor socio económico.

Sea como fuere, la opción de la guerra no es otro medio, sino el fin.

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