miércoles, 3 de octubre de 2007

Úlitmas noticias del BBVA sin espacio en la prensa.

MULTINACIONALES:EL SEGUNDO BANCO ESPAÑOL CONSIGUE RESULTADOS HISTÓRICOS GRACIAS A SUS PECULIARES MÉTODOS
El currículum negro del BBVA
Martín Cúneo / Redacción

Compra de voluntades políticas, lavado de dinero, financiamiento de empresas contaminantes o que fabrican armas... el historial del gigante financiero español está repleto de puntos oscuros.

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Desde el año pasado la Segunda División de fútbol español tiene nombre de banco: la Liga BBVA. Las cosas no parecen irle mal al segundo banco español, que se ha convertido en los últimos años en "la primera institución financiera de la región eurolatinoamericana", según afirma la web del BBVA en Venezuela. El reciente éxito del banco debe mucho a América Latina, de donde obtiene el 45% de sus beneficios globales. Es precisamente en esta región donde la distancia entre el banco que gana todos los años premios a la Responsabilidad Social Corporativa y el que denuncian multitud de organizaciones resulta más abismal.

Cuando en 2005 la filial del BBVA en México canceló las cuentas de dos grupos de apoyo zapatistas (Osimech y Enlace Civil), el banco se justificó en el "probable lavado de dinero" realizado a través de esos proyectos. Cuando el BBVA, a través de su filial en Colombia, exigió a la comunidad de paz de San José de Apartadó -imparcial en el conflicto- que retirara su dinero del banco, fue porque "procedía del narcotráfico".

Resulta curioso que por estos dos supuestos, lavado de dinero y relación con el narcotráfico, el BBVA ya había sido investigado en numerosas ocasiones. De hecho, el FBI y la Fiscalía del Estado acusó al banco de utilizar estas mismas prácticas, precisamente, en las adquisiciones de sus filiales de Colombia y México. En la actualidad el BBVA controla el segundo banco de Colombia y el primero de México y ocupa los primeros puestos en otros 14 países de la región, donde es el primer grupo en seguros y planes de pensiones.

La receta
El BBVA descubrió América en 1995. Los mercados financieros desregulados, la falta de competencia, la escasa bancarización de la economía y el atractivo de los bancos públicos con millones de clientes puestos a la venta por los gobiernos neoliberales, convirtieron a América Latina en el nuevo 'El Dorado' financiero para los dos principales bancos españoles. Entre 1997 y 2002, el BBVA invirtió 7.800 millones de dólares en la compra de 34 entidades de toda Latinoamérica. En 2004 ya tenía 23 millones de usuarios y manejaba 106.000 millones de euros procedentes de recursos de clientes.

El caso argentino ejemplifica el modelo de negocio del BBVA. En 2003, la Audiencia Nacional admitió a trámite la denuncia de ahorristas argentinos que habían perdido sus ahorros en la crisis de diciembre de 2001. Acusaban al BBVA de publicidad engañosa "dirigida a crear en la mentalidad de los consumidores argentinos la falsa imagen de que sus ahorros quedaban garantizados por uno de los más solventes bancos del mundo". La denuncia también señala al banco como corresponsable del vaciamiento de fondos con información privilegiada antes del 'corralito'. Numerosos observatorios de multinacionales denuncian la forma en la que se construyó el imperio: compra de voluntades políticas para hacerse con los mercados locales, lavado de dinero, paraísos fiscales, financiación de empresas altamente contaminantes y fabricantes de armamento...

Además de cobrar comisiones diez veces más altas que en España, según el presidente del Banco de México, parte de la rentabilidad del BBVA en la zona se debe a su política laboral. Las denuncias sindicales se amontonan: en Colombia, bonificaciones suculentas a los trabajadores que se salen del rango sindicalizado en donde tienen efecto los convenios colectivos; en Perú, despidos masivos -en especial de personal sindicado-, aumento de la jornada de trabajo sin compensación, deterioro de los sueldos... Ya lo dice su eslogan, "Adelante", sin importar demasiado quién queda atrás.



BBVA Y COMPRA DE VOLUNTADES POLÍTICAS EN LATINOAMÉRICA
David Llistar, miembro del Observatorio de la Deuda en la Globalización

El primero en abrir una investigación sobre el entonces BBV es el FBI estadounidense, en 1999. En 2001 el Banco de España abre otra investigación que poco más tarde será detenida y retomada por lo penal por la Audiencia Nacional española. Mientras el FBI inició su proceso en respuesta a la acusación realizada por el ex subdirector de la filial puertorriqueña del BBV de la que irradiaron buena parte de las operaciones, y a la búsqueda de vínculos con el narcotráfico, el Banco de España lo hizo con ansias de tapar un grave error de supervisión al descubrir que el BBVA había aflorado una gran cantidad de dinero opaco de una de sus filiales en un paraíso fiscal que tenía por objeto negocios también opacos.

A su vez, la Audiencia Nacional y la Fiscalía Anticorrupción españolas iniciarían sus indagaciones a raíz de hurgar en corruptelas ligadas a la Expo 92 de Sevilla que les conducirían al BBV Privanza y a encontrar -por cierta casualidad, según el propio juez Garzón- uno de los hilos de toda una trama internacional.

¿En qué países? Más allá de Colombia, Puerto Rico, España o Panamá, los países involucrados en el megacaso del BBVA serían los paraísos fiscales de las islas de Jersey (Reino Unido), Gran Caimán y Suiza, y en el continente americano tendría implicaciones de diversa gravedad sobre México (Probursa), Perú (Continental), Venezuela (Provincial), los Estados Unidos (Bank of New York), e incluso derivaciones menos documentadas hacia Chile y Cuba. En total, 13 países, una corruptela harto globalizada.

Los principales protagonistas son algunos directivos y altos ejecutivos del BBVA, algunos personajes mafiosos locales, altos dirigentes políticos que reciben apoyos o prebendas económicas del banco, el Secretario de Estado de hacienda español Rodríguez Ponga (Partido Popular), y Nelson Rodríguez, el testimonio protegido motivado por una cierta necesidad de 'abrir el melón' difícil de esclarecer.

La compra irregular del Banco Ganadero, por ejemplo, no fue más que la derivación colombiana de una trama aún más compleja, de distintas puntas, que el BBV habría urdido, según algunas opiniones, para hacerse con el control de algunas plazas bancarias principales en México, Perú, Colombia y Venezuela; para evadir impuestos, en especial al fisco español; para deshacerse 'amistosamente' de algunos directivos que en los distintos procesos de fusión confluirían en el BBVA y que serían incómodos o redundantes en el consejo de administración del grupo. Según la Fiscalía Anticorrupción, el Banco Ganadero fue adquirido en posición preferente por el BBV a personajes asociados al narcotráfico y al paramililtarismo (entre ellos el llamado 'Zar de las Esmeraldas'), a cambio de blanquearles dinero de procedencia irregular.

De forma inexplicable, el juez de la Audiencia Nacional Grande-Marlaska, sustituto de Baltasar Garzón, archivó el caso Probursa en 2001, y en 2005 repitió con la investigación al BBVA por supuesto blanqueo de dinero del narcotráfico y el paramilitarismo (Operación Fidugán), señalando que las diligencias llevadas a cabo hasta entonces "no han ofrecido resultados positivos desde la perspectiva incriminatoria".




LA CAMPAÑA 'BBVA SIN ARMAS' DENUNCIA LA FINANCIACIÓN DE LA GUERRA

Las inversiones explosivas del BBVA
Jordi Calvo Rufanges / Barcelona (Centre Delàs)
El BBVA invierte cifras millonarias en empresas como Indra, Hispasat o Rymsa, que fabrican armamento. Diversas ONG denuncian inversiones en empresas que fabrican bombas clúster o de racimo. El banco lidera las exportaciones de armas italianas
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MIT

Según los datos facilitados por el Centre Delàs en la web de la Campaña BBVA sin armas (www.bbvasinarmas. org), existe un buen número de inversiones del BBVA en empresas productoras de armamento.

En concreto, el BBVA invierte en Hispasat, industria aeronáutica con programas militares; en Indra, una empresa de electrónica que dedica aproximadamente la mitad de su producción a aplicaciones militares (Eurofighter, fragatas F-100, helicópteros Tigre, blindados, misiles); en Ibérica del Espacio, una industria aeronáutica con programas militares; y en RYMSA, que fabrica sistemas de comunicación y radar con aplicación militar. Además, el BBVA invierte en CESCE (Compañía Española de Seguros de Créditos a la Exportación), que hace posible las exportaciones de armas que de otro modo no se materializarían, asegurando estas operaciones, que en caso de impago incluso pueden aumentar la deuda externa del país comprador. En el informe Inversiones explosivas.

Instituciones financieras y municiones clúster, elaborado por la organización belga Netwerk Vlaanderen, se muestra que el BBVA participó en una agrupación internacional de 28 bancos por un préstamo a cinco años de 1.500 millones de euros a Thales, que produce misiles, a través de su filial TDA, algunos de los cuales son municiones clúster. Hizo lo propio, financiando con 25 millones de dólares a través de una agrupación internacional de 30 empresas financieras que proporcionó un crédito a cinco años de 1.700 millones de euros a Raytheon, que produce la Joint Standoff Weapon (JSOW), una bomba que se lanza desde el aire y que tiene algunas variantes de municiones clúster. También financió a EADS, fabricante del avión de combate Eurofighter (de la cual forma parte la empresa española Construcciones Aeronáuticas SA, CASA) a través de una agrupación de 36 bancos que le proporcionaron un crédito a siete años de 3.000 millones de euros, cuando este consorcio tenía participación en TDA en 2005.

Una investigación del Centre Delàs revela que el BBVA es una de las principales entidades financieras de exportaciones de armas italianas. Según datos oficiales del Gobierno italiano, el año 2002 ocupó el primer lugar de la clasificación por volumen de financiación de exportaciones de armas italianas. Además, en 2006 continuó financiando más de 53 millones de euros de armas italianas, incluyendo países que no cumplen con el Código de Conducta de la Unión Europea, como es el caso de Israel.


ATAQUES AL MEDIO AMBIENTE
El BBVA financia a varias empresas involucradas en proyectos con grave impacto sobre el medio. Uno de los proyectos es el de la planta de celulosa que la empresa española Ence empezará a construir en octubre en Conchillas (frontera de Uruguay con Argentina). Una parte de su coste de 930 millones de euros ha sido financiado por el BBVA. La planta, que pretende producir desde 2010 un millón de toneladas de celulosa al año, empleará, según el Centro de Derechos Humanos y Ambiente, un proceso que "resultará en el descargue de monóxido de carbono, dióxido de azufre y dióxido de cloro (...) en el agua y la atmósfera" y generará residuos de plomo, cadmio, cromo y arsénico. Otro megaproyecto, el del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) de Ecuador, que con 503 km. une las concesiones petrolíferas de la Amazonía con el puerto de Esmeraldas y por el que circulan 400.000 barriles de crudo al día, empezó a operar en 2003 a pesar de la oposición de la población. El OCP, en el que participa Repsol y que recibe financiación del BBVA, atraviesa 11 áreas protegidas, en violación del Convenio de Diversidad Biológica y la Western Convention. Según Ecologistas en Acción, durante su construcción se vertieron 22.000 barriles de petróleo que afectaron al agua que abastece a la población de Quito.

También Minera Yanacocha de Perú, acusada de contaminar el agua con cianuro y provocar un vertido de mercurio, recibió 100 millones de dólares del banco a cambio de "derechos" sobre las exportaciones, según el Centro de Investigaciones sobre Empresas Multinacionales. Además de otros proyectos en Latinoamérica, BBVA financiará en EE UU once centrales térmicas de carbón que emitirán 78 millones de toneladas de CO2 al año.

LAS CUENTAS ESCAPAN AL CONTROL DE LAS AUTORIDADES

El BBVA posee más de 25 sociedades en paraísos fiscales

Víctor Astorga / Madrid

En Suiza, las Islas Caimán, Antillas Holandesas... A pesar de lo declarado en sus campañas corporativas, el banco se sitúa entre las empresas con mayor actividad en zonas 'off-shore'.
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FRANCISCO GONZÁLEZ. El presidente del BBVA sucedió a Emilio Ybarra.

En la historia económica española queda la incógnita de hasta qué punto, cuando en 1999 decidieron fusionarse los bancos BBV y Argentaria, los directivos de este último eran conscientes de la dimensión que alcanzaban las cuentas secretas del que sería su nuevo socio. El 'banco dentro del banco' que poseía el BBVA quedaba al descubierto años más tarde tras una investigación de la Audiencia Nacional en 2002. En total, la caja B, abierta en 1987 en Jersey (Islas del Canal) y ampliada en 1991 en el paraíso fiscal de Liechtenstein, sumaba unos 37.343 millones de pesetas (224 millones de euros) de los cuales 3.500 se invirtieron en 22 fondos de pensiones a nombre de ex consejeros del BBV, pertenecientes a la élite económica del país, entre quienes se incluía al entonces presidente, Emilio Ybarra.

Desde entonces, la asociación mental de ideas entre BBVA y áreas de dudosa reputación fiscal ha sido un problema de imagen especialmente combatido por las campañas de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) del banco. Así, a propósito de estos paraísos, en 2005 el director de la Responsabilidad Social del BBVA, José Ángel Moreno, señalaba "el compromiso de la dirección del BBVA de ir reduciendo nuestra presencia en los mismos".

Desde entonces, las cifras ponen en duda la puesta en práctica de ese compromiso. El pasado mes de mayo, la revista Capital señalaba una lista de 27 sociedades del BBVA con sede en conocidos paraísos fiscales como Jersey o las Islas Caimán, o países como Luxemburgo o Suiza, que ofrecen un trato fiscal bastante ventajoso. Con ello, junto a Telefónica y Repsol, el Bilbao Vizcaya Argentaria se sitúa entre las tres empresas españolas del Ibex 35 con mayor presencia en estas áreas.

Lejos de cualquier control
Sin preguntas sobre el origen del dinero, con legislaciones fiscales laxas, cuando no inexistentes, y lejos del control de las administraciones, las ventajas de mantener estas cuentas superan con creces el daño que pueda causar a la imagen del banco.

Ante estas prácticas también las autoridades españolas miran hacia otro lado. Según denunció en 2006 el Grupo de Acción Financiera Internacional, la legislación no establece prohibición alguna para mantener relaciones comerciales con las sociedades- pantalla. Tampoco el Gobierno español cuenta con una estimación sobre las sociedades que sirven de pantalla a las empresas españolas en paraísos fiscales. El motivo de la falta de control lo explicaba la investigadora de Economía Bibiana Medialdea (DIAGONAL nº 15): "La función de los paraísos fiscales no es una consecuencia indeseada del funcionamiento del sistema, vinculada con la delincuencia y el blanqueo de capitales. La existencia de los paraísos fiscales es consustancial y necesaria para la lógica de las finanzas".

En esa línea, el pasado marzo se hacía visible cómo los pecados fiscales del BBVA no han de temer duras represalias judiciales. Después de cinco años la Audiencia Nacional resolvía el escándalo de las cuentas secretas. El fallo del tribunal declaró la nulidad de las actuaciones y el archivo del caso de las "cuentas secretas" por la "inexistencia de perjudicados". Los sí beneficiados, ex consejeros con fondos de pensiones millonarios procedentes de paraísos fiscales, respiraron con alivio.




Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/

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